THAT BOY IS A MONSTER-. Capítulo VI.

Capítulo VI.

Las palabras en cursiva son recuerdos, flashback.
Las palabras en negrita & cursiva son llamadas, sueños, etc.


- Si, si, si. Me gusta tenerte así, que me acaricies, que me beses- Comencé a decir cuando sentí como comenzaba a masajear mas fuerte sobre la tela del bóxer- Y ya..ya caí en tus garras.


- Te falta algo mas nene- Oí que dijo en tono de triunfo- Caíste en mis garras y eres..


-Soy tuyo..


Y después de que dije eso sentí como me despojaba de un solo jalón de mis bóxers dejando al descubierto mi erección, lo mire atentamente y este se quito la ropa que traía encima lo más rápido que pudo, sabía que iba a pasar, sabía que lo íbamos a hacer de nuevo y en vez de que me diera algún remordimiento por pensar que éramos hermanos, no paso eso sino al contrario deseaba que lo hiciera de un vez, deseaba volver a sentirlo.


- Gírate nene- Oí que me dijo mi gemelo;


Le hice caso y me gire boca abajo a la cama, sentía como se posicionaba entre mis piernas y como ponía sus manos en mis nalgas estirándolas dejándome completamente expuesta mi entrada ante él. Tenía mi rostro enterrado en la almohada, sentí como la mano izquierda de mi gemelo comenzaba a vagar por mi entrada, tocándola y de un movimiento un poco brusco penetrándola.


- ¡Ahh!, ¡Con más cuidado imbécil!- Le dije levantando mi cara de la almohada,


Al aparecer mi gemelo hizo caso omiso a lo que le dije e introdujo otro con la misma fuerza que había introducido el primero, esta vez no dije nada porque comenzaba a sentir el mendigo placer avanzar en mi cuerpo al sentir sus dedos dentro de mí. Los abría en forma de tijeras, formaba círculos y eso hacía que cerrara los ojos, se sentía inmensamente bien.


- Oh..si..si.


- Eres un puto nene- Dijo mi gemelo aumentando el ritmo del movimiento de sus dedos- Un puto que me encanta.


- Mas..Tom..mueve más los dedos- Pedía yo mientras mordía mi labio inferior.


Y así lo hizo mi gemelo, siguió moviendo los dedos lo más rápido que podía. Sentí como mi espalda se arqueaba debido al placer que me estaba dando con tan solo sus dedos, de repente sentí como los saco bruscamente. Iba a girar mi cabeza para verlo, para ver porque los había sacado así como si nada pero no puede, no lo hice porque sentí como era invadido por el mimbro de mi gemelo.


- Mmmm- Gimió el roncamente.


Comenzó a moverse desde un principio rápido y fuerte, sentía como entraba y salía de mi haciendo que mis ojos se cerraran debido al placer que estaba sintiendo, mis manos se estiraron sobre la cama apoyando todo mi peso en ellas, mis rodillas se acomodaron haciendo que quedara levantado, mi gemelo tenía las manos en mi cadera moviéndome contra él mientras él, se movía contra mí. Abrí los ojos un poco bajando la vista dándome cuenta de que yo también ocupaba atención, estaba excitado y mi pene dolía. Dirigí mi mano a mi pene estaba a punto de cerrarla cuando la mano de mi gemelo se interpuso tomando mi miembro entre su mano.


- ¡Ah si!..si..- Gemí cuando lo sentí comenzar a moverla de arriba abajo- Mmmm..


Me sentía en la gloria, no podía creerlo sentía como mi espalda se arqueaba, como mis piernas temblaban, como mi respiración era incontrolada. Nunca antes me había sentido así, pues claro porque nunca antes había dejado que me dieran por atrás, y ahora quien me daba era mi hermano, mi gemelo y vaya que lo hacía tan bien. Comenzó a moverse más rápido, penetrándome más fuerte y más duro, sentía como todo su miembro se adentraba en mí, como entraba por completo tocando ahí, ese punto que hacía que gimiera de placer.


- ¡Ahh! Si Tom..si..mas..mas..quiero..mas- Gemía sin vergüenza- Mas..Mas.


- ¿Quieres mas nene?..eh..- Cuestionaba entre suspiros- Te voy a dar..hasta partirte.


- Si..si mas..parteme..- Definitivamente ninguna pizca de vergüenza quedaba en mí.


Mi gemelo aun con una mano en mi miembro, y la otra en mi cadera comenzó a moverme contra el más rápido, más fuerte. Su miembro entraba y salía, yo podía sentir como mis nalgas chocaban contra su cadera de una manera fuerte y rápida. Seguimos así unos minutos más, hasta que sentí como de mi miembro comenzaba a salir un líquido espeso, avisando que ya estaba a punto de llegar y correrme.


- Me voy..me voy a venir Tom- Comencé a decirle mientras dejaba mi cabeza caer al frente- Me..me vengo.


- Espera..nene..córrete al mismo tiempo que yo.


Y sentí como aumentaba más la velocidad de las embestidas, estaba a punto de llegar al orgasmo, podía sentirlo ya no aguantaría demasiado. Abrí la palma de mis manos y atrape un poco de sabana en cada mano haciéndola puño cuando sentí que me corría y cuando mi gemelo se corría dentro de mí.


- ¡Ahh..si, si!-Dije cuando deje caer todo mi cuerpo de golpe al colchón.


- Me encantas nene.


Mi gemelo se dejo caer arriba de mi, sin salir de mi, sentía su respiración entre cortada en mi oído y como su pecho chocaba con mi espalda cada que respiraba, tenía que aceptarlo, debía aceptarlo Tom me gustaba y mucho porque si no fuera así ¿Cómo dejaba que me diera por detrás? El tenia razón, me gustaba demasiado y no sabía porque, es mi hermano y se supone que no debe ser, se supone que no debe gustarme, ni darme por culo pero me gusta, me gusta que lo haga y si soy sincero a mi mismo dejaría que lo hiciera cuantas veces quisiera. Bill Kaulitz has aceptado que te gusta tu hermano y ya no hay marcha atrás. Mi hermano salió de mi y se quito de encima, se recostó a un lado de boca arriba gire mi cara al buro que tenia alado de mi fijando la vista en el reloj dándome cuenta de que apenas eran las nueve de la mañana no había dormido nada.


- Tengo hambre nene- Dijo mi gemelo mientras ponía su mano sobre mi espalda acariciándola de arriba abajo.


- Pues ve y hasta algo de desayunar porque yo no te voy a preparar nada- Le respondí.


- Tienes que hacerlo nene, tienes que hacerme algo de comer porque me muero de hambre por tu culpa.


- ¿Mi culpa? ¿Cómo que te mueres de hambre por mi culpa?- Cuestione.


- Porque me dio hambre gracias a que gaste mis energías follandote nene- Dijo con una sonrisa cuando gire mi cabeza para mirarlo- Acabaste tú con mis energías así que creo que me merezco que me hagas el desayuno.


- Yo no te dije que me follaras- Le solté.


- Pero bien que te gusto- Y sentí mis mejillas arder. Suspire y me levante de la cama ¿Por qué rayos iba hacerle desayuno? Ni yo mismo lose, pero lo haría- ¿Qué quieres que te prepare?


- No lose, lo que sea pero que no sepa mal algo rico como tú.


Me puse de nuevo los bóxers que mi gemelo me había quitado, después de desayunar ocuparía darme una ducha porque estaba demasiado pegajoso. Me dirigí a la cocina estando solo en bóxers, era mi casa no había nadie más a excepción de mi hermano quien ya me había visto desnudo ¿Por qué preocuparme por quien pudiera verme?. Busque algo en el refrigerados y solo encontré jamón, mayonesa, queso amarillo y en la alacena estaba la barra de pan definitivamente me urgía ir a comprar algo de mandado sino quería morirme de hambre. Prepare los sándwich, dos para Tom y dos para mí los deje en la mesa y me les quede mirando, ¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué lo hacía? Tom es mi hermano gemelo y sé que lo odio, no lo quiero porque me dejo, me abandono y por más que me ha dicho que lo olvide no puedo olvidarlo porque me dolió demasiado. Y ahora vuelve y dejo que me folle eso es demasiado raro, es demasiado..enfermo, pero en cierta parte no me importa porque me gusta, aunque no quiera reconocerlo ante el yo sé que mi gemelo a mí también me llama mucho la atención y me gusta. Y no solo pensaba en eso, sino en que cuando había estado con Natalie no me excite en lo mas mínimo con las caricias y besos que me estaba dando, y ahora cuando Tom empezó así rápido sentí como me excitaba.


- Estabas borracho Bill, por eso no sentiste nada- Me dije antes de comenzar a caminar con la comida a mi habitación.


Llegue a la habitación y me gemelo seguía tendido en la cama desnudo bajo las sabanas, me dirigí a la cama y me senté del lado contrario, le tendí el plato donde estaban los emparedados y este los miro con una ceja alzada, yo no le hice caso y comencé a comer los míos. Los dos desayunábamos en un silencio incomodo, o bueno era incomodo para mí, no lo miraba porque me daba un poco de vergüenza pero ¿Por qué? después de lo que ya habia hecho con él no sabía porque me sentía con vergüenza e intimidado. De repente recordé de lo que me había enterado ayer, primero que Tom se había acostado con la novia de su ''mejor amigo'' y lo otro que tenía un trabajo un poco peculiar el cual le dejaba demasiado dinero.


- Tom.. ¿Puedo preguntarte algo?- Dije dirigiendo mi mirada hacia él. Este como tenia comida en la boca solo movió la cabeza en respuesta de si- ¿Por qué te acostaste con la novia de tu mejor amigo? ¿Cómo pudiste hacerle eso?


Tom trago la comida y me miro con una sonrisa, ¿Qué era lo chistoso de lo que le había preguntado? No entendía, dejo el plato donde había traído la comida y lo dejo en el buro que estaba a su lado para luego incorporarse bien y responder a mi pregunta.


- Porque quise, su novia me gustaba y quería tirármela aparte de que sabía que no le convenía para nada a Brian- Respondió sereno.


- Pero era tu mejor amigo ¿Qué no? No entiendo cómo te acostaste con su novia.


- Ya te lo dije nene, quería tirármela y no era la indicada para él y porque es mi mejor amigo se lo demostré.


Suspire y mordí mi sándwich, Tom ya se había terminado la comida se levantaba de la cama y comenzaba a buscar su ropa, yo comía y lo miraba caminar por toda la habitación buscando sus cosas. De verdad que mi hermano estaba muy bueno, moví la cabeza de un lado a otro y volví hablar.


- ¿En que trabajas Tom? ¿Qué haces para ganar dinero?- Cuestione, el giro su cabeza y me miro.


- ¿Para qué quieres saber en qué trabajo?- Me respondió el con otra preguntar.


- Pues quiero saber porque para haberte comprado ese carro y para que tus amigos me hayan dicho que tienes el suficiente dinero como para comprar una casa mucho mejor que esta debes tener un trabajo muy bueno- Dije mientras me levantaba de la cama- Dime, ¿En que trabajas?


- Mira nene, a ti no tiene que importarte en que trabajo- Me dijo- Tu no preguntes nada y no comentes nada.


- ¿Por qué no? Quiero saber en que trabajas, dime ¿Qué tiene de malo?


- Que no quiero decirte, eso. No entiendo para que quieres saberlo eso a ti no te incumbe.


Y después de que me dijo esto salió de la habitación, ¿Qué tenia de malo que me dijera en que trabajaba? Nada, yo solo quería saber comenzaba a pensar que mi hermano era bipolar. Estaba recogiendo los platos para llevarlos a la cocina y después meterme a bañar cuando sonó mi celular, comencé a buscarlo hasta que lo encontré en el bolsillo de mi pantalón lo tome y mire quien me hablaba, era Natalie tome el celular pero no hice nada, no conteste no quería hablar con ella no tenía ganas. Lleve los platos a la cocina y cuando pasaba por el pasillo me di cuenta de que Tom ya se estaba dando una ducha, lo mismo haría yo. Busque mi ropa y la lleve conmigo al baño, ahí me cambiaria me quite el bóxer y abrí la llave de la ducha dejando que el agua llenara la tina. Mientras miraba como la tina se llenaba comencé a preguntarme ¿Qué quería decir Tom cuando decía que había caído en sus garras? ¿Qué ya no podía haber marcha atrás?, la primera no la podía responder pero la segunda tal vez, era verdad ya no había marcha atrás, ya había aceptado que mi hermano me gusta y que me gustaba que me follara eso ya no podía cambiar, pero ¿Qué quería decirme con que había caído en sus garras?. Tal vez estaba loco, la tina se lleno y yo me adentre en ella, tomaría un baño lento y de agua caliente para relajarme, mientras me bañaba más de una vez había oído como el timbre sonaba y en la última ya no lo escuche, supuse que Tom había abierto y atendido. Termine de bañarme y me cambie, me alistaría aunque no supiera si iba a salir o no, cuando salí al pasillo me tope con Tom quien iba con su celular en la mano y con una enorme sonrisa en el rostro.


- ¿Quién tocaba el timbre?- Pregunte mientras me dirigía a mi habitación.


- Alguien sin importancia nene, no te preocupes- Dijo antes de entrar a su habitación.


No tome importancia e hice lo mismo, entre a mi habitación y comencé a peinarme y maquillarme no tenía la menor idea de si hoy me llamarían y saldría de fiesta pero por si las dudas estaría arreglado desde temprano. Apenas había terminado de alistarme el cabello cuando la puerta se abrió dejando ver a mi gemelo quien también ya estaba listo, llevaba sus pantalones anchos, una camisa negra con un dibujo que no logre descifrar, el perfume que usaba y que me gusta y su pañuelo en la frente me miraba atentamente y yo igual.


- ¿Qué pasa?- Me anime a preguntar.


- ¿De casualidad tú no has visto una sudadera morada por aquí?- Pregunto. Inmediatamente súper a que sudadera se refería, a la que yo había agarrado cuando él no estaba en la casa.


- No, no he visto ninguna sudadera morada ¿Por qué?- Mentí, no le diría que me había metido a su habitación.


- Es que no la encuentro pero bueno, por ahí a de estar- Dijo mientras se adentraba a la habitación y cerraba la puerta- ¿Por qué te arreglas? ¿Vas a salir?- Cuestiono cuando ya estaba detrás de mí.


- Pues no se la verdad, pero es mejor estar preparado- Respondí dejando la plancha en el tocador.


Me gire y quede frente a frente con mi gemelo, este me miraba directamente a los ojos con sus manos en los bolsillos de su pantalón. Debía admitir que de verdad era guapo, muy guapo pero ¿Desde cuándo me parecía guapo? ¿Desde cuándo había aceptado que me gustaba?, así se me olvidaba, desde que follamos por primera vez.


- No vas a salir con tu estúpida noviecita ¿verdad?.


- No le digas estúpida a Natalie, no tienes porque llamarla así no la conoces- Le respondí un poco molesto por lo que había dicho.


- Claro la defiendes porque es tu noviecita- Dijo con una sonrisa mientras se alejaba de mi- Nene ocupo que quede claro algo.


- ¿Qué? ¿Qué insultas a todos mis amigos?- Le pregunte con sarcasmo. Era verdad, no solo había insultado a Natalie si no también a Georg.


- Yo creo que he sido muy claro con lo que te he pedido que digas, y creo que tu también has sido muy claro con lo que has respondido- Se sentó en la orilla de la cama- ¿Verdad?


- No sé a qué te refieres- Respondí. No sabía qué rayos quería decir.


- Mira nene, creo que ya te quedo demasiado claro que me gustas y me vale una mierda que seas mi hermano- Si, eso ya lo sabía- Y creo que a ti también y te quedo claro que yo te gusto.


- Si, pero ¿Qué con eso? No te entiendo.


- A mi no me gusta compartir lo que me gusta y lo que es mío- Dijo levantándose y acercándose a paso lento y con una mirada seria hacia a mi- Y contigo nene, no es la excepción.


¿Por qué no habla claro? ¿Por qué le da tantas vueltas? No le estaba entendiendo a nada de lo que me estaba diciendo, sabía que estaba siendo muy claro el pero yo no le entendía para nada. Se acerco a mí hasta el punto de hacer que chocara contra el tocados arrinconalandome, apoyo sus manos a cada costado de mí y me miro a los ojos.


- No me gusta compartir lo que es mío nene.


- Y ¿Qué es tuyo? No te entiendo.


Tom sonrió y pego su frente a la mía. De verdad que comenzaba a pensar que mi hermano era bipolar ya que como había aparecido su sonrisa así se esfumo.


- Tú eres mío nene, ya te lo dije y tú lo aceptaste- Me respondió.


- ¿Qué? ¿Qué yo soy tuyo?- Dije sorprendido por lo que me había dicho- No, no estas loco ¿verdad?.


- No, no estoy loco nene te estoy diciendo que tu eres mío y que no me gusta compartir lo que me gusta y lo que es mío.


- Yo no soy tuyo. Yo solo soy tu hermano con el que has follado ya tres veces- Dije- Nada más.


Tom se separo de mí, se quito de enfrente y sin decir nada se acerco a la puerta abriéndola para luego quedarse parado y mirándome. Sentía su penetrante mirada sobre mí, se le formo de nuevo una sonrisa dio un paso y luego hablo.


- Estas equivocado nene, tu eres mío y te vas a dar cuenta muy pronto.


Y después de haber dicho eso último salió de mi habitación cerrando la puerta de un asoton, me gire para ver mi reflejo en el espejo y note como mi cara era de sorpresa y de no entender ni mierda. ¿Yo suyo? Claro que no, es mi hermano y si hemos follado pero eso no quiere decir que se suyo, me gusta si y yo le gusto pero eso tampoco quiere decir que sea suyo, si tal vez yo le había dicho que era suyo cuando lo estábamos haciendo pero era por el momento, porque había querido que me siguiera dando pero nada más, al igual que había dicho que había caído en su garras lo cual no entendía, pero no yo no soy suyo. Tome mi celular y le marque a Georg quería saber si ahora habría alguna fiesta o algo porque la verdad tenía muchas ganas de salir y divertirme.


- Hola Georg, ¿Cómo estás?- Le preguntaba mientras me sentaba en la casa.


- Muy bien Bill y ¿Tu? Esa sorpresa, ¿A Qué debo tu llamada?


- Pues es que quiero saber si hoy habrá alguna fiesta o reunión, la verdad tengo muchas ganas de salir.


- Pues no sé, pero si hay estoy seguro de que yo no asistiré- Respondió- Hoy tengo un asunto que atender y creo que me tomara todo el día.


- ¿Qué asunto?


- Un asunto Bill, no te puedo decir pero ahora no estaré en la ciudad- Me respondió.


- Oh bueno, entonces creo que hoy no saldré a ningún lugar y yo que ya me había alistado.


- Esta Natalie Bill, ¿Por qué no sales con ella?.


- Pues la verdad, no tengo ganas de salir con ella yo quería salir contigo y con Gustav pero estoy seguro de que como no vas a estar hoy Gustav tampoco saldrá- Dije un poco desanimado, pues en verdad tenía ganas de salir.


- Pues lo siento amigo, pero en verdad ocupo atender ese asunto- Se disculpo- Pero cuando ya lo haya resuelto, te aseguro que salimos y nos desvelamos en una buena fiesta.


- Conste ya dijiste Georg- Dije con una sonrisa- Esta bien, nos vemos.


Colgué, bueno mis planes de por lo menos tener una fiesta se había arruinado, era verdad tenia a Natalie pero no tenía ganas de salir con ella, nose si era porque no quería verla o porque me daba vergüenza lo que me había pasado de que no había logrado calentarme estando con ella. Decidí salir de mi habitación por lo menos vería un rato la tele, era demasiado temprano y sabía perfectamente que sería un día muy largo.


Llegue al living y me senté en el sillón más grande encendiendo el televisor, la casa estaba silenciosa no había nada de ruido y por lo que logre observar Tom no se notaba que estuviera por la casa. ¡Fantástico! El también había salido.


- Hay Bill no tienes nada que hacer, que aburrida es tu vida- Me dije a mi mismo mientras cambiaba de un canal a otro.


Comenzaron a pasar las horas y yo estaba que me moría de aburrido. No tenía nada que hacer y mi única opción para pasar un buen rato era ir a buscar a Natalie, me levante del sillón apague la televisión y antes de salir por la puerta me fije que hora era, apenas eran las cinco y media de la tarde. Tome las llaves y salí, iría a la casa de Natalie solo esperaba que sus papas no estuvieran para no tener que quedarme todo el rato platicando con ellos mientras Natalie esta a mi lado muriéndose de pena por eso. Iba caminando por la cera de las calles y me daba cuenta de que todo estaba completamente solo, no había ningún carro o alguna persona en la calle lo que se me hizo demasiado raro, aquí en Madgeburg a todas horas hay gente en la calle, sea de madrugada, de noche o de día siempre hay gente y la mayoría vandalillos de los que nunca faltan. Por fin había llegado a la casa de Natalie, es de dos pisos color blanca y una cerca grande color negra, no había carros por lo que se me formo una sonrisa en los labios eso quería decir que sus papas no estaban. Abrí la cerca y me acerque hasta la puerta, toque el timbre dos veces y cuando iba a tocarlo una tercera vez me abrió.


- Hola Natie- Dije con una sonrisa y tratando de acercarme para darle un beso pero esta se alejo.


- ¿Qué haces aquí Bill?- Me pregunto.


- Pues vine a visitarte y por lo que veo tus papas no están ¿verdad?


- No, mis papas no están salieron muy temprano hoy- Me respondió cortante, ahora ¿Qué traía?- ¿Para qué viniste?


- Pues ya te dije, vine a visitarte y a ver si podía quedarme un rato contigo- Dije con una sonrisa de medio lado- ¿Puedo pasar?


- No.


- ¿Qué?- Dije sorprendido- ¿Por qué no puedo pasar Natie? ¿Qué tienes?.


- Quiero que te vayas Bill, no quiero verte no tengo ganas- Me respondió, muy bien ahora si no sabía que pasaba ni porque decía eso- Así que por favor vete.


- ¿Por qué quieres que me vaya? Tus papas no están, puedo quedarme y así los dos pasaríamos un buen rato.


- Ya te dije que no Bill, no quiero verte quiero que te vayas- Volvió a responderme.


- ¿Qué te pasa Natalie? ¿Por qué estas enojada?.


- No estoy enojada.


- ¿Entonces porque fregados me estás hablando así?- Le pregunte sin rodeos- Estas prácticamente corriéndome y diciéndome que no quieres verme.


- No te estoy corriendo, solo te estoy diciendo que no quiero verte.


- ¿Por qué? ¿Qué te pasa?- No entendía porque no quería verme y porque me estaba diciendo que me fuera, no entendía- Yo que vine para visitarte y me pides que me vaya.


- Sí, quiero que te vayas porque no soy una estúpida Bill ¿Ok?, quiero que te vayas no quiero que estés aquí.


- Y ¿Quién te dijo que eres una estúpida?.


- Pues al parecer tú piensas que lo soy- Me respondió cortante y enojada- Anda, mejor vete a tu casa que de seguro te están esperando.


Y después de que me dijo esto me cerró la puerta en la cara, ¿Qué fregados se traía? ¿Por qué me había hablado así? ¿Qué había hecho ahora?. Me aleje de la puerta caminando, no entendía porque me había hablado así lo único que sabía era que me había molestado, me habia prácticamente corrido y no solo eso me había cerrado la puerta en la cara, no iba a volver a tocar la puerta y pedir una explicación, eso yo no lo hacía, si estaba enojado por algo dejaría que se le pasara y luego ella me buscara y me explicara.


- ¿Ahora qué vas hacer para no aburrirte Bill?- Me pregunte mientras iba por la calle caminando.


De repente recordé lo que Brian y Abram me habían dicho de Tom.


Creo que todavía tu hermano no te ha contado a que se dedica ¿verdad?


Si, Tom no me había dicho a que se dedicaba y cuando se lo pregunte ahora en la mañana me dijo que no me importaba y que no era de mi incumbencia saber, que no estuviera metiéndome en asuntos que no me correspondían. Eso era lo que me había dicho Brian, después cuando llegamos a la casa Abram me dijo algo más.


Un gusto conocerte Bill, se nota que eres un buen tío lástima que tengas por hermano a Tom


Sí, yo sabía que era una lástima tener por hermano a Tom, porque simple y sencillamente no lo consideraba mi hermano, desde que se había ido y me había dejado para mi prácticamente había dejado de serlo, porque un hermano jamás te abandone y te dice en una indirecta que no le importas, pero ahora lo que son las cosas de la vida, me gusta y he dejado que me dé por detrás. Pero eso era algo que yo nada más sabia, lo que no entendía era ¿Por qué me lo había dicho el?. Como era demasiado temprano, decidí pasear un rato por la ciudad caminando, no tenía nada mejor que hacer.


Así se me paso el tiempo lo más rápido que pudo, cuando me fije en la hora eran las nueve de la noche, tenía hambre y quería llegar a la casa y ver si Tom ya había llegado de su salida, quería saber a qué se dedicaba y de una u otra forma iba a enterarme. Había llegado a la casa y note que el carro de mi gemelo ya estaba estacionado afuera, junto con otros dos carros, una camioneta negra grande una Cadillac y un carro negro como el de mi gemelo, rápidamente supe que carro era, era el mismo carro en el que Brian y Abram me había traído a la casa, acelere el paso pues por lo que podía notar acababan de llegar ya que mire como la puerta la cerraba un tipo alto, piel morena y robusto, Gastón pensé de inmediato. Camine rápido y llegue hasta la puerta la cual estaba abierta sin seguro, de un aventón la abrí y me encontré con que todos, todos los amigos que mi hermano me había presentado estaban en el living, me dirigí hacia donde estaba y ahí los mire.


- ¿Qué paso?- Pregunte cuando mire que Tom estaba sentado en el sillón con su mano derecha tocándose la pierna.


- Hola Bill, ¿Cómo estás?-Me pregunto Abram con una sonrisa- Pensamos que no estarías en casa.


- Pues sí, ya ven aquí estoy y estoy bien pero, ¿Qué le pasa a Tom?


Mi gemelo tenía su mano haciendo presión en la pierna, y se notaba que estaba enojado pues en su rostro podía mirar la mueca de enojo. ¿Qué había pasado ahora?, estaba a punto de dar unos pasos para llegar a donde estaba pero Gastón se puso frente a mí.


- Creo que es mejor que te quedes donde estas niño- Me dijo impidiéndome el paso.


- ¿Qué pasa? ¿Por qué Tom esta así?- Cuestione sin darle importancia a lo que me había dicho el tipo ese.


- Bueno lo que pasa es que tu hermano estaba en una pele..- Estaba contándome Sam pero Tom lo interrumpió.


- ¡Cállate estúpido! No digas nada- Le grito.


Mire como Sam después de oír eso se callaba, y no decía nada mas, solo se sentaba a lado de Nicolás quien estaba hablando por teléfono en voz baja, como si quisiera que yo no lo escuchara. Quería acercarme a ver qué era lo que Tom tenía y lo que se estaba ocultando pero Gastón no se movía y no me dejaba, entonces de la nada mire como Brian entraba al living con un trapo mojado.


- Aquí está el puto trapo- Dijo acercándose a donde estaba Tom- Quita la mano para que pueda limpiar.


- Aquí no, vamos a la habitación- Dijo Tom levantándose del sillón y pasando por alado de mí.


Mire como Brian lo seguía con el trapo mojado en las manos, no aparte mi vista de ellos hasta que se adentraron en el cuarto y oí como cerraban y le ponían seguro a la puerta. Gire mi cabeza y Gastón ya no estaba enfrente de mí, se había sentado donde hace unos segundos mi hermano había estado, cuando mire que Tom iba caminando iba cojeando, no apoyaba bien su pie derecho y en la mano le había notado un poco de sangre.


- ¿Qué le paso a Tom?- Les pregunte a todos esperando a que alguien respondiera, pero nadie lo hizo- Les hice una pregunta, ¿Qué le paso a Tom?


- Nosotros no podemos decirte nada niño, que te lo diga tu hermano- Me respondió Gastón sin mirarme.


- No me digas niño que no soy un niño, y no me importa quiero que me digan ustedes ¿Qué le paso a Tom en la pierna?- Volví a preguntar.


- Mira Bill, como ya te dijo Gastón nosotros no podemos decirte nada, ya vez como tu hermano callo a Sam, si tu hermano no te lo dice no es nuestro problema pero, lo único que podemos decirte es que de nosotros no sabrás nada- Dijo esta vez Abram.


¿Por qué nadie quería decirme algo? yo quería saber que fregados le había pasado a Tom y todos se negaban a darme una respuesta, en definitiva me estaba molestando por eso.


- Sam- Dije acercándome hasta donde él estaba- Dime tu, tú estabas a punto de decirme que le había pasado a Tom.


- Lo siento Bill pero ya no puedo, ya oíste a tu hermano- Fue su respuesta.


- ¿Por qué fregados le hacen caso a Tom? ¿Por qué dejan que les grite?- Pregunte sacado de mis casillas porque no querían decirme nada.


- Porque se lo debemos y porque es nuestro jefe- Respondió Gastón mirándome con una cara de pocos amigos.


¿Su jefe? ¿Qué acaso ellos trabajaban donde Tom? No pude evitar poner cara de sorpresa cuando él me respondió eso, de verdad que no entendía nada y claro ¿Cómo entender? Cuando Tom no me quiso decir en que trabajaba, cuando me dijo que no era de mi incumbencia. Resignado porque sabía que nadie me diría nada me senté quedando alado de Gastón mientras el miraba hacia la nada, de verdad que era un tipo raro, cuando lo conocí no me había dado cuenta pero ahora lo hacía.


Estaba mirando como Nicolás seguía hablando por teléfono hasta que Brian aparecía recargándose en la puerta del marco.


- Ya esta, ya podemos irnos cada quien a su casa- Informo a los demás.


- ¿Qué dijo Tom?- Pregunto Sam levantándose del sillón.


- Que esperáramos a que nos llamara, que él nos diría cual sería el siguiente movimiento- Respondió comenzando a caminar a la puerta de salida- Ahora vámonos.


- Esta bien- Dijeron los cuatro al mismo tiempo.


Mire como se levantaban del sillón y comenzaban a salir de la casa, yo hice lo mismo me acerque a la puerta y una vez que note que se habían ido cerré la puerta con seguro y me encamine a la habitación de Tom no me importaba nada, quería saber que le había pasado y en qué demonios trabaja y porque era el jefe de los demás.


- Tom ¿Puedo pasar?- Pregunte cuando estuve frente a su puerta.


- No nene, no tengo ganas de ver a nadie- Respondió.


- No me importa yo quiero entrar- Y así lo hice, sin permiso gire la perilla y entre al cuarto mirando como Tom estaba acostado en su cama.


- ¡¿Qué acaso no oíste que no quería que pasaras?!- Me pregunto en voz alta, casi en un grito.


- Si, pero yo te dije que no me importaba quiero que me digas que te paso y en qué demonios trabajas para que seas el jefe de todos tus ''amigos''- Le dije mientras me ponía frente a la cama.


Mire como Tom hizo una mueca de dolor cuando se levanto de la cama y apoyo el pie en el que le había visto la mano haciendo presión, se acerco hasta mí y me tomo bruscamente del brazo.


- Te sales tu solo o te saco yo- Dijo apretando el agarre.


- No, yo no me voy a salir de tu cuarto hasta que me digas que te paso, porque y en que trabajas.


Y en vez de recibir una respuesta recibí un fuerte jalón, Tom me arrastro apretándome el brazo hasta sacarme de su habitación, me aventó hacia el pasillo haciendo que chocara con la pared para después cerrar la puerta.


- Tom ¡Abre la puerta quiero saber que te paso!-Le grite mientras le pegaba a la puerta.


- ¡Ya te dije que no estoy de puto humor así que déjame en paz!- Me grito.


Me grito eso y deje de pegarle a la puerta para que me abriera, me dirigí a mi habitación y me encerré en la mía, si de regreso a la casa me había dado hambre ahora no tenia se me había quitado gracias a la culpa de mi gemelo. Hoy había sido un día muy largo y de puros enojos por lo que me di cuenta, primero Natalie la había ido a visitar y me corría diciéndome que no quería verme, luego llegaba a la casa y me preocupaba por ver que le había pasado a Tom y este solo me sacaba del cuarto a jalones. Un momento, ¿preocupado? ¿por Tom? No eso no podía ser, ¿Por qué iba a preocuparme por el si él no se había preocupado por mi cuando se fue? No, yo no estaba preocupado ¿verdad? Solo tenía curiosidad por saber que le había pasado.


Sin darme cuenta me quede dormido, con la ropa puesta y maquillado, había estado preguntándome en que podría trabajar mi hermano y que era lo que le podía haber pasado que termine por quedarme dormido.


Estaba dormido placenteramente, sentía como mi cuerpo estaba descansando al igual que mi mente, mis ojos cerrados pero se abrieron cuando comencé a escuchar como tocaban el timbre rápido, un toque tras otro. Abrí los ojos lentamente y dirigí la mirada al reloj notando que eran las dos de la tarde, vaya ahora si había dormido bien, el timbre que había estado escuchado que sonaba y sonaba había dejado de hacerlo, me estaba levantando de la cama dándome cuenta de que seguía con las mismas pintas de ayer cuando la puerta de mi habitación se abrió de golpe dejando ver a Gustav quien traía los ojos hinchados, en sus mejillas había rastros de lagrimas pero en sus ojos, en la mirada que traía había enojo.


- Gustav- Dije sorprendido- ¿Qué haces aquí? ¿Qué pasa? ¿Por qué vienes así?.


- ¡Hey estúpido! Nadie te dio permiso de entrar, solo te abrí la puerta que ¿Crees que esta es tu puta casa o qué?-Pregunto Tom enojado entrando a mi habitación también.


- Tom ¡Cállate!- Le grite- No le hables así a Gustav ¿entendiste?.


Mire como Tom no decía nada y se paraba en el marco de la puerta, Gustav estaba parado frente a la cama mirándome no entendía que le pasaba, ¿Por qué había entrado así a la casa y a mi cuarto? ¿Por qué había estado llorando? Porque era obvio que lo había hecho, me acerque a él hasta ponerme enfrente y apenas lo había hecho Gustav se abalanzo sobre mi abrazándome cosa que me sorprendió.


- Gus..Gustav- Dije sorprendido ante su reacción y mire como Tom también se sorprendía.


- Bill..Georg..Georg- Decía mientras me abrazaba fuertemente igual que yo a él, no entendía que le pasaba.


- ¿Qué pasa Gus? ¿Qué tiene Georg?- Pregunte mientras sentía como sollozaba contra mi hombro.


- El..el Bill..Georg..-No salía ninguna palabra de su boca o más bien no podía hacer que salieran- Georg..


Me separe del abrazo que Gustav me estaba dando hasta hacer que quedáramos rostro a rostro, mirando como comenzaban a caer lágrimas por sus mejillas.


- Gustav, tranquilízate y dime ¿Qué pasa con Georg?- Cuestione ya desesperado porque quería saber, que me dijera me estaba preocupando.


- Bill.. Georg está..Esta muerte- Helado, sorprendido, con los ojos bien abiertos al igual que la boca.


- ¡¿Qué?!- Pregunte sorprendido mientras lo soltaba- ¡¿Qué acabas de decir?! ¡Estas mintiendo ¿verdad?!.


- No Bill..Georg está muerto- Decía entre sollozos.


No podía creer lo que me estaba diciendo Gustav, no podía creerlo ¿Cómo que Georg muerto? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Cómo? comenzaba a preguntarme mientras sentía como mis piernas comenzaban a flaquear, el no podía estar muerto, ¿Por qué lo estaría? El no tenía enemigos, esto debía ser una puta equivocación.


- No Gus, te estás equivocando yo ayer hable con Georg me dijo que saldría de la ciudad porque tenía unos asuntos que arreglar-Le conté- El no puede estar muerto.


- Si Bill, estaba fuera de la ciudad, encontraron su cuerpo a las afueras de aquí en la carretera tirado- Me comenzó a decir- Me llamaron a mí en la madrugada preguntándome si conocía a un Georg Listing, yo dije que sí y me dijeron que estaba muerto.


- No, es que no. Esto no puede ser tienen que estar equivocados-Sentía como mis ojos comenzaban a cristalizarse.


- Yo tampoco lo podía creer Bill, cuando me llamaron dije también que debían estar equivocados.


Me senté en la orilla de la cama tratando de asimilar lo que Gustav me estaba contando, no podía creer lo que me estaba diciendo ¿Por qué habrían querido matar a Georg? ¿Quién?, las lagrimas comenzaron a caer por mis mejillas levante la vista y mire a mi gemelo quien seguía recargado en el marco de la puerta parado sin ninguna expresión. Lo mire detenidamente, si sabía que Tom no había conocido del bien a Georg pero la primera noche que Tom la paso aquí platico con él y por lo que note a Georg le había caído muy bien mi hermano.


- ¿Qué tú no te sientes mal por lo que Gustav me está diciendo?- Le cuestione- ¿Eh?


- ¿Por qué debería sentirme mal? Yo no lo conocí del todo bien- Fue su respuesta.


- Pero le hablaste, lo trataste un poco deberías por lo menos sentirte un poco mal- Decía mientras me levantaba de la cama.


- Lo siento nene, pero yo no me siento mal por los demás, solo puedo sentirme mal cuando me pasa algo a mí- Dijo esto y luego salió de la habitación dejándonos a Gustav y a mi solos.


Mire como Gustav se pasaba las manos por el rostro limpiándose el rastro de lagrimas, no podía creer lo que me estaba diciendo era simplemente sorpréndete, Georg era mi amigo desde hace años, cuando Tom se fue lo conocí a él y a Gustav, el siempre estaba conmigo invitándome a sin fin de fiestas, a pasar las noches en su casa, haciendo que conociera demasiada gente, nunca me dejaba solo siempre él y Gustav estaban conmigo haciéndome sentir bien, mas en ese momento cuando Tom se había ido.


- Y, ¿Por lo menos tienen a quien o quienes lo mataron?- Pregunte apretando los puños.


- No, la policía me dijo que no había visto a nadie, solo encontraron al cuerpo alado de la carretera junto con una nota.


- ¿Una nota?- Pregunte- ¿Qué decía la nota?


- Qué eso le pasaba a la gente incumplida y que no pagaba a tiempo- Trague saliva, ¿Qué clase de nota era esa? ¿Cómo que eso le pasaba a la gente que no cumplía y pagaba a tiempo?.


- ¿Gustav te.. te dijeron como murió, como lo mataron?- Pregunte con cierto miedo.


- Lo balacearon y después le prendieron fuego- Volví a tragar saliva- Lo encontraron gracias al humo que estaba desprendiendo.


No podía creerlo, no podía creer que Georg hubiera muerto así, balaceado y quemado ¿Qué clase de persona podía hacer eso? ¿Qué clase de persona podía matar a otra?, sentía como las lagrimas no paraban de salir de mis ojos y como el enojo corría por mis venas, no podía creer que uno de mis mejores amigos estuviera muerto.


- El cuerpo ya está aquí en la ciudad y la mama de Georg ya quiere hacer el funeral, quiero que la ceremonia sea ahora en la tarde y el entierro en la noche- Me informo Gustav- Yo solo venia avisarte y a decirte, tengo que ir con la mama de Georg a apoyarla en todo.


- Solo me baño y me cambio y voy a la casa de la señora Listing- Le dije- Estaré allá en un rato, lo más rápido que pueda.


- Ok, estaré esperándote.


Gustav salió de mi habitación y oí como salí de la casa cuando cerraba la puerta de entrada, no podía, no quería creerlo Georg estaba muerto y no tenían al estúpido o estúpidos que lo habían asesinado. Comencé a buscar ropa, tenía que ir de negro y lo más presentable, busque unos pantalones negros ajustados, una camisa de manga larga negra y solo me maquillaría levemente los ojos, tome la ropa y me dirigí al baño, estaba a punto de entrar cuando escuche como mi hermano hablaba por teléfono.


- Si, ya está hecho…si todo salió a la perfección..-Respondía mi hermano- Creo que después de esto nos meremos una muy buena celebración..claro después de eso quedara claro que con nosotros no se juega..si por supuesto..dile a los demás que hoy en la noche festejaremos..si..la fiesta aquí en mi casa..ok, ok está bien..si hasta en la noche.


Oí que mi hermano dejaba de hablar y se dirigía a la puerta así que me adentre en el baño lo más rápido que pude para que no se diera cuenta de que lo había escuchado hablar, ¿Qué rayos había sido esa conversación? ¿Cómo que todo había salido bien y que después de eso sabrían que con ellos no se juega? No entendía nada, mi hermano era definitivamente raro.