THAT BOY IS A MONSTER-.Capítulo XIX.

Capitulo XIX.

ESTE CAPITULO DEBE SER ACOMPAÑADO CON UNA CANCION DE FONDO, PONLA A CARGAR & CUANDO SE INDIQUE EN EL TEXTO DALE CLIC.

Canción de fondo.

Las palabras escritas en cursiva son recuerdos, flashback.

Las palabras en negrita & cursiva son llamadas de telefono, sueños, etc.
Las palabras en cursiva & con * es la conciencia de Bill.




— Jajajajaja— Comenzó a reírse. — Eso no cuenta nene, porque sabes perfectamente que nadie más podría jugar conmigo porque tú eres al único que le permitiría estar en el fabuloso juego del ''monstruo''.


— ¿Por qué nadie más podría..jugar este juego contigo? —Pregunte. Lo que había dicho me había gustado, que a nadie más le permitiría jugar con él. — Dime ¿Por qué?


— Porque este juego está especialmente hecho para ti—Dijo con una mirada penetrante. —Solo para ti.


— Entonces creo que sí, que no llevo ningún punto a mi favor.


— Mientras yo nene, yo voy ganando.


Nos quedamos un rato acostados o más bien yo me quede acostado ya que después de que Tom terminara de decirme eso se fue al baño a darse una ducha y comenzó a cambiarse. Yo estaba poniéndome de nuevo la pijama también me daría una ducha no me iba a quedar todo sudado y pegostioso. Acaba de ponerme los pantalones de mi pijama y la venda de nuevo la herida seguía dándome comezón y me ardía pero no le iba hacer caso, se me tenía que quitar la herida no es profunda así que ¿Qué problemas me puede dar?. Mire como Tom termino de cambiarse y como tomaba las llaves de su carro y las metía en su bolsillo.


— Vas a buscarlo ¿verdad? — Le pregunte al ver que estaba por salir de su habitación.


— ¿A quién?¬—Pregunto el sin voltearse.


— No te hagas el que no entendió Tom, vas a buscar a Axel ¿verdad?


— Si ya sabes ¿Para qué preguntas? Es obvio que voy a buscarlo—Respondió girándose y mirándome. —Pero cuando venga espero que estés despierto y en la casa.


— Claro aquí estaré, pero ¿Para qué quieres que este despierto? —Le pregunte con curiosidad, la verdad estaba cansado y quería dormir.


— Tu yo tenemos que hablar de algo muy importante— Y se fue.


Yo solo asentí con la cabeza cuando se fue y también salí de su cuarto en dirección al mío, me fije en el reloj para mirar que horas eran y me di cuenta de que eran las cuatro de la tarde. Me había levantado a la una y ahora son las cuatro, no cabe duda que el tiempo se me había pasado volando. Tome ropa y me dirigí al baño, cuando me adentre me quite la enfadosa venda y me mire la herida y abrí la boca por completo, ahora no solo estaba roja sino que se estaba poniendo de un color morado y no comenzaba hacerse por lo menos una costra.


— Dios no se me puede haber infectado—Dije mirando por el espejo mientras tocaba lentamente. —Me limpie bien la herida.


Seguía observándola pero aunque me quisiera engañar a mi mismo no podía, la herida estaba completamente mal no se miraba nada bien y eso no me gusta, me ardía, me dolía y me daba demasiada comezón. Abrí la llave de la regadera y deje que corriera unos minutos hasta que se pusiera tibia como a mí me gusta y cuando me adentre sentí un gran alivio, era como si la herida se quitara, ya no sentía dolor o comezón, sentía agradable. Me talle el cuerpo, me lave el pelo y me limpie de nuevo la herida esperando que se quitaran todas esas molestias. Termine de bañarme y salí de la regadera, me seque y comencé a cambiarme como no saldría a ninguna parte y Tom me había dicho que quería verme aquí y despierto pues solo me pondría unos pantalones, una camisa un poco floja para que no me hiciera presión en el costado que estaba herido y las botas, me maquillaría un poco los ojos y me la pasaría mirando la televisión en lo que llegaba.


*¿Contento Bill? —Preguntaba otra vez esa voz. Gire mi cabeza y me mire parado en la puerta del living. —Digo, debes estar contento eres un COMPLETO IDIOTA.*


— ¡Cállate! Serás mi puta conciencia pero no tienes derecho a gritonearme e insultarme—Respondí enojado.


*¡Claro que tengo derecho porque es lo que eres! Un puto idiota, pero está bien no me quisiste hacer caso ahora tu mismo comenzaras a darte cuenta de lo estúpido que eres, te darás cuenta por ti solo.*


— Bueno pues entonces deja que me de cuenta yo solo—Dije arto. —Que no te importe lo que haga o no, ya te dije que ya estoy bastante grandecito para saber lo que hago.


*Pues si estarás grandecito pero no sabes lo que te conviene y lo que deberías NO hacer.*


Iba a responder a eso ultimo que dijo pero no pude ya que sonó el timbre de la puerta y esta desapareció como si nada, de verdad que seguía sin gustarme el verme a mí mismo hablándome, era demasiado raro y extraño sin contar que nada creíble o que pasa todo los días. Me levante del sillón en el que estaba y me encamine a la puerta, la abrí y me quede sorprendido al ver quién era. Natalie, ella era la que estaba del otro lado, tenía la mirada hacia el piso y las manos entrelazadas por enfrente.


— Natalie ¿Qué haces aquí? —No pude evitar preguntar.


— Yo bueno..yo vine porque..necesito.. —Hablaba pausado y mirando hacia el piso. — Necesito hablar contigo.


— Claro pasa—Dije haciéndole una señal para que entrara a la casa, debía aprovechar que estaba aquí para hablar con ella, decirle que debíamos terminar y preguntarle si ella le había dicho a Tom que habíamos regresado. — Vamos al living.


Nos encaminamos al living esta solo me siguió sin decirme nada, se miraba tan rara. La mirada no la quitaba del piso y sus manos aun seguían entrelazadas. Me senté en el sillón esperando que ella se sentara a un lado, ya una vez la había terminado y había sido por culpa de Tom, volví con ella para ahora terminarla de nuevo pero por decisión mía. Me le quede mirando que no se sentaba, sino que seguía parada.


— Natie puedes sentarte—Le dije con una sonrisa esperando que me mirara.


— Bill.. necesitamos hablar—Dijo en tono serio y levantando la mirada para encontrarse con la mía. — Necesitamos hablar de algo muy importante.


— Si Natalie yo también necesito hablar contigo e algo muy importante—Comente levantándome del sillón y poniéndome delante de ella. —Pero bueno, habla tu primero.


Note como Natalie se llevo una mano a la cabeza y se tallo la frente, se notaba nerviosa y no muy segura y me sorprendía eso porque yo la conozco y ella no es así, si por algo me había gustado era porque siempre es segura y sabe lo que quiere.


— Bill..tu sabes que yo te quiero ¿verdad? —Me pregunto mirándome a los ojos. — Sabes que te quiero demasiado.


— Si lo sé Natie.. —Dije asintiendo con la cabeza. — Pero eso ¿A qué viene? ¿Es lo importante que tienes que decirme?


— No, eso no es lo importante que tengo que decirte..lo que pasa es que yo.. —Seguía haciendo pausas y ahora se movía de un lugar a otro. —Yo..tu..es que..


— Natalie tu sabes que me gusta que hablen claro así que hazlo por favor—Le pedí.


— Bill..yo lo siento, de verdad lo siento—Comenzó a decir mientras sus ojos comenzaban a cristalizarse. —Yo jamás..jamás haría algo que te dañara, sabes que te quiero pero..yo Bill.. lo siento mucho de verdad.


No le entendía a ninguna palabra que estaba diciendo, no entendía que quería decir con lo siento, yo jamás haría algo que te dañara, no entendía ni una puta mierda. Pero entonces, recordé lo que yo le iba a preguntar, no podía ser ella no podía a verle dicho a Tom que regresamos ¿Por eso se estaba disculpando? Tenía que saberlo.


— ¿Por qué dices que lo siente Natalie? —Pregunte acercándome más a ella. — ¿Qué es eso que tanto sientes?


— Bill sabes que eres un chico muy importante para mí, fuiste mi primer novio.. —Comenzó a decir dejando que lagrimas salieran por sus ojos. —Pero..pero yo lo siento ya no puedo estar contigo.


¡PUM! Mis ojos se abrieron completamente al igual que mi boca, ¿Qué había dicho? ¿Qué ya no podía estar conmigo? ¿Estaba terminando conmigo? No lo podía creer, ¿Eso era lo importante que tenía que decirme?, completamente sorprendido, sin a verme esperado que me dijera eso así estaba. Ella agacho la mirada cuando termino de decirlo y volvió a entrelazar sus manos por enfrente, lagrimas seguían cayendo por sus mejillas y yo, yo simplemente estaba que no me la creía.


— ¿Estas..estas rompiendo conmigo?


— Si..si Bill, estoy terminando contigo—Me confirmo. —Yo lo siento pero ya no puedo estar contigo, yo..yo ya no quiero estar contigo.


— ¿Por qué estas terminando conmigo? —No puede evitar preguntar, quería saberlo jamás pensé que ella vendría a terminarme. —Dímelo, no me enojare.


Natalie trago saliva y volvió su vista hacia mí, nerviosa, si ella estaba nerviosa lo podía notar.


— Yo te quiero Bill, y te quiero mucho eres un chico muy especial para mí pero..creo que me gusta otra persona—Dijo en voz baja como si no quisiera que la escuchara. —Creo que alguien..alguien más me gusta.


— Y ¿Por eso me estas terminando?


— Si Bill, por eso te estoy terminando y por eso vine hasta aquí.


— Vaya eso me sorprende—Dije con una sonrisa. La verdad no me dolía en lo mas mínimo que Natalie estuviera terminando conmigo, me alegraba así yo no era el que le decía que teníamos que terminar y en cierta parte me alegro por eso quería decir que ella no le había dicho nada a Tom ¿verdad?. — Natalie ¿Puedo preguntarte algo?


— No lo conoces, no es de aquí así que no sabes quién es—Me respondió rápidamente,


— No tenía intención de preguntarte quien es el chico que ahora te gusta—Dije con una sonrisa y tonándola de una mano. —Lo que quiero preguntarte es, ¿Tú le dijiste a Tom que habíamos vuelto?


Sentí como esta se tensaba ante mi pregunta, volvió a bajar la mirada dio un largo suspiro y fijo su vista de nuevo en mi. Yo esperaba una respuesta y esperaba que esa respuesta fuera un gran ''No Bill, yo no le dije nada a Tom'', porque si la respuesta era si, estaba seguro que me iba a enojar demasiado.


— No Bill, yo no le dije nada a Tom de que tu y yo regresamos—Me afirmo. —Yo no hablo con..con tu hermano para nada.


— Bueno me alegra saber que puedo confiar en ti—Dije con una sonrisa.


— Lo..lo siento Bill, de verdad lo siento—Dijo abalanzándose contra mí para abrazarme y comenzar a llorar. —Te quiero mucho, lo siento.


No entendí porque esa acción de Natalie, lo único que pude hacer fue abrazarla, a mi no me dolía en lo más mínimo que ella estuviera diciéndome que le gustaba otra persona, que creía estar enamorada de alguien más. Y ¿Por qué no me dolía? Porque yo no siento ya nada por ella, ya no la quiero como antes ¿A quién quiero ahora? ¿Quién si me lastimaría si me dijera que no le gusto? Tom, con el si me dolería.


— Ya Natalie, no tienes porque llorar y pedirme perdón eso pasa— Dije tratando de consolarla.


— De verdad espero que me perdones Bill, de verdad espero que esto no te lastime en lo mas mínimo, te quiero pero.. —Hizo una pausa. —Me he enamorado de alguien más.


— Ya hombre, no tienes porque decir que lo sientes ya te dije que eso pasa no te preocupes.


Seguí así un rato más con Natalie abrazada a mí diciéndome una y otra vez que lo sentía y que esperaba que no me enojara con ella, pero ¿Cómo enojarme? Como ya lo he dicho no me duele en lo más mínimo que le guste alguien más, a decir verdad creo que es mejor. Natalie después de haberme dicho eso quería irse, pero le pedí que se quedara un rato mas conmigo, solo unos minutos para no estar solo en la casa esta accedió y se quedo. Miramos la televisión, mas de una vez le pregunte que si como era el nuevo chico que le gustaba y si lo conocía, pero esta me respondió que no, que no lo conocía y que no era de aquí, que probablemente jamás lo había mirado. Estábamos platicando o más bien yo estaba tratando de sacarle platica a Natalie ya que esta solo seguía diciéndome lo siento, lo siento pero sonó mi celular. Me levante del sillón y corrí a mi habitación para tomarlo y contestar, el numero era desconocido cosa que me sorprendió.


— Bueno, ¿Quién habla? —Pregunte.


— Bill ¿Eres tú? —Preguntaron al otro lado de la línea.


— Si, soy Bill ¿Quién habla? —Volví a preguntar. — ¿Quién es?


— Bill soy Brian, necesito que salgas rápido de tu casa, necesito que salgas de ahí y te vayas a otra parte—Dijo en tono nervioso. —Quiero que salgas de esa casa ahora.


— ¿Por qué? ¿Por qué tengo que salir de la casa? tengo visitas.

— Bill tienes que salir de esa casa ya, salte de ahí—Volvió a decir esta vez mas desesperado. —Hazme caso por favor.


— No, yo no puedo salir de la casa porque Tom me dijo que quería que lo esperara aquí y que no me fuera.


—Pues ahora dice ¡QUE SALGAS AHORA MISMO DE ESA CASA! ¡QUE TE VAYAS A OTRA PARTR YA! —Me grito. —Quiere que salgas ya mismo.


— ¿Por qué? ¿Qué pasa?


— ¡Pasa que necesitamos que salgas de ahí, que te largues de ahí ahora mismo! —Oí que gritaba alguien más, era Tom sin duda.


— ¿Por qué? ¿Qué pasa que quieren que salga de la casa? —Pregunte ahora preocupado.


— Bill tu solo haz caso y sal ya de ahí por favor, hazlo ya—Me pidió Brian. —Ve a un lugar que conozcas y donde estés con alguien, no estés tu solo.


— Esta bien, saldré de la casa— Apenas respondí esto y Brian colgó.


Ahora si no entendía nada, no entendía que estaba pasando. Tome mi celular y salí de mi habitación, me habían dicho que ocupaban que saliera de la casa entonces lo haría. Llegue al living y Natalie todavía estaba ahí, le dije que necesitábamos ir a su casa está al principio me pregunto porque, pero pues solo le puede decir que era mejor que estuviéramos hablando en su casa, termino por aceptar y salimos por suerte esta traía su carro y nos dirigimos en él a su casa. Yo iba manejando, me había dado las llaves para que yo manejara iba a dar vuelta en una esquina cuando un carro negro se paro frente a nosotros.


— ¿Qué pasa Bill? —Pregunto Natalie al ver que el carro se paraba frente a nosotros y no se movía. —Bill, arranca no esperes a que él se mueva.


— No me puedo mover Natalie, me está tapando el paso—Respondí nervioso.


El carro seguí parado frente a nosotros sin intención de moverse ¿Qué rayos estaba haciendo? Y ¿Qué estaba pasando?. Entonces sin poder mover el carro mire como la puerta del carro de enfrente se iba abriendo dejando ver como la persona que iba conduciendo bajaba los pies. Trague saliva al ver que la persona estaba bajando pero sentí un gran alivio al ver quien era quien estaba en el carro.


— ¿Brian? —Dije sorprendido mirando cómo se acercaba al carro. —¿Qué haces aquí? —Pregunte cuando se puso alado de mi ventana.


— Bájate del carro Bill, te vienes conmigo—Me dijo con voz firme y seria. —Que la chica se vaya a su casa pero tú te vienes conmigo.


Sin decir nada y entender abrí la puerta de piloto y baje del carro, espere hasta que Natalie se cambiara de asiento y arrancara, Brian me tomo del brazo y me comenzó a jalar llevándome al carro del cual había bajado, se notaba nervioso y enojado. Entre al carro sentándome en el asiento de copiloto, Brian entro segundos después, encendió el carro de nuevo y arranco. Iba demasiado rápido y no hacia ningún alto o parada en los semáforos, tenía las dos manos en el volante y lo presionaba con fuerza, yo solo lo miraba sorprendido porque no entendía que estaba pasando.


— Brian.. —Me anime a decir. — ¿Qué pasa? ¿Por qué pediste que saliera de la casa?


— Porque era necesario Bill—Fue su respuesta.


— Dime que está pasando, ¿Por qué Tom grito que saliera de la casa? ¿Dónde está el? ¿Está bien? —Pregunte recordando que mi querido hermano iba a buscar a Axel.


— Por el momento está bien, el no corre peligro el que lo corre eres tu—Respondió mirándome unos segundos. —Tú eres el que corre peligro.


— ¿Yo? ¿Por qué yo corro peligro? —Pregunte sorprendido. —Yo no he hecho nada.


— Eres hermano de Tom, con eso Bill, con ese simple hecho corres peligro—Dijo en tono de preocupación. — ¿Ya pensaste en lo que te dije? ¿Ya sabes quién es la persona que te digo?


— ¿De qué hablas? —Pregunte sin entender a que se refería. — ¿Cómo que si ya pensé en lo que me dijiste?


Brian se giro y me miro sorprendido y creo que con..enojo. Volvió su vista a la calle y siguió manejando.


— Ni siquiera te has puesto a pensar en lo que te dije ¿verdad? —Dijo en tono de enojo. —¿Qué no me habías preguntado porque querías saber?


Entonces entendí a que se refería, era verdad yo no me había puesto a pensar en ningún momento en todo lo que me dijo, no me había puesto a pensar en quien sería la persona que mi hermano quiere dañar y que Brian no quiere. Se me había olvidado por completo eso.


— La verdad no, no me he puesto a pensar en lo que me dijiste—Respondí con sinceridad.


Note como el apretó mas el volante y movió la cabeza de un lado a otro lentamente. Fije mi vista en la ventanilla y note que ya no estábamos en las calles de la ciudad sino que en una carretera, abrí los ojos sorprendido por eso, volví a mirar pero con más atención y rápidamente reconocí porque carretera íbamos. Era la misma carretera por la que habíamos llegado al rancho de Brian, donde había sido su fiesta.


— ¿Por qué vamos por esta carretera?


— Tu hermano me pidió que te trajera aquí para que estuvieras seguro—Me respondió sin mirarme. — No quería que estuvieras solo en la casa sabiendo que los estúpidos amigos de Axel te andan buscando.


— ¿Me están buscando a mi? ¿Por qué? —Pregunte nervioso y con miedo. —¿Qué quieren conmigo?


— Ya te dije Bill, eres hermano de Tom.


— Y eso ¿Qué tiene que ver? ¿Qué tiene que ver que sea hermano de Tom? —Pregunte alterado.


Brian no respondió a mi pregunta, mire por el espejo de adelante que ya habíamos llegado al rancho y que nos estábamos adentrando. Estaciono el carro en el mismo garaje que lo había estacionado Tom cuando habíamos venido. Apago el carro y bajo de este dejándome a mí adentro, rápido yo abrí la puerta y baje también. Mire como Brian ya había avanzado unos cuantos metros hacia la entrada del rancho y yo camine rápido para alcanzarlo, no me había respondido a la pregunta que le había hecho. Cerró la gran puerta de madera y se giro encontrándose conmigo.


— ¿Qué tiene que ver que yo sea el hermano de Tom? ¿Por qué por ese simple hecho quieren dañarme?


— Eres el punto débil de Tom, ¿Qué no te das cuenta Bill? —Me pregunto. ¿Yo? ¿El punto débil de Tom?. —Los que quieran vengarse de Tom ahora que saben que eres su hermano querrán cobrárselas contigo.


— Pero..no entiendo.. ¿Por qué conmigo? —Pregunte entre asustado y sin entender. —No lo entiendo, pero estoy seguro de una cosa.


— ¿De que estas seguro? ¿De qué te estoy diciendo la verdad?


— No, no es eso. Estoy seguro de que Tom no dejaría que nadie me hiciera daño—Respondí con una sonrisa. Aunque no me había agradado mucho la idea de verlo matar frente a mis ojos a una persona lo había hecho porque me habían pegado y tratado de darme por culo, y ahora con Axel quería hacer lo mismo porque me había lastimado, me quedaba claro que Tom no dejaría que nadie me hiciera algo. —El no dejara que nadie me lastime sin cobrárselas.


— Claro que no dejaría que nadie te hiciera daño Bill—Dijo mirándome a los ojos. —Porque el único que quiere hacerte daño es el.


Yo fruncí el ceño ante eso que había dicho, ¿Ahora me iba a salir con que Tom quería dañarme a mí? Por favor. Me le quede mirando seriamente y Brian comenzó a caminar de nuevo pasando de mí, me gire y mire que se dirigía a la casa. No me quedo de otra y lo seguí, no es que tampoco quisiera quedarme afuera aparte de que el sol se estaba escondiendo ya y comenzaba hacer un poco de frio. Me adentre en la casa y cerré la puerta, Brian se encontraba sentado en un sillón tomando un bote de coca-cola y con la televisión prendida.


— ¿Cómo esta Tom? ¿Estaba con Axel y los demás? —Pregunte, quería saberlo por algún motivo sentía un fuerte dolor en el pecho.


— Si, cuando yo me vine el estaba con toda esa bola y con Gastón y los demás— Respondió sin mirarme. —No te preocupes, estoy seguro de que a Tom no le pasara nada.


— ¿Por qué dijiste que Tom me quiere hacer daño? ¿Por qué dices eso? Es mi hermano, estoy seguro de que no sería capaz de eso.


— Te abandono, te dejo ¿Qué no lo recuerdas? —Dijo esta vez mirándome a los ojos. —Bill pon atención por favor y abre los ojos, yo no te puedo decir nada de lo que quiere hacer Tom y sabes la razón, pero ya te di pistas. Solo es cuestión de que te pongas a pensar y que lo descifres.


— Y ¿Qué se supone que tengo que descifrar? ¿Qué Tom quiere lastimarme a mí? ¿Qué yo soy esa persona que tú no quieres que lastime? —Pregunte con sarcasmo, era obvio que eso no podía ser.


Brian solo me sonrió y movió la cabeza como negando, yo estaba seguro de que eso no era, aparte ¿Por qué Tom querría dañarme a mi? Ya una vez lo había hecho dejándome con mi abuela y yéndose sin mí, no le veo porque regresaría y ''querría lastimarme'' eso es algo estúpido, para mí que Brian está equivocado. Yo seguía de pie, mirando como Brian tomaba su coca-cola y como miraba atentamente el celular que llevaba en sus manos. De repente me lleve la mano al costado rascándome fuertemente por arriba de la camisa, ya había vuelto la estúpida comezón y el ardor, me rascaba ''sigilosamente'' pero al parecer Brian lo noto.


— ¿Qué te pasa?


— No nada, lo que pasa es que.. —Dije mientras me comenzaba a rascar de nuevo. — Tengo un poco de comezón nada más.


— Te estás rascando donde te hirieron—Dijo levantándose del sillón y caminando hacia mí.


— No, no te preocupes no es nada de la herida—Dije mintiendo. —Lo que pasa es que.. soy muy alérgico y creo que..bueno pues la tierra que hay aquí en el campo no me favorece mucho.


— No soy tonto Billy—Dijo con una sonrisa. — Se te infecto la herida ¿verdad? Te dije que te llevaba al hospital y no quisiste.


— ¡Ya te dije que no! —Le grite. — No tiene nada que ver con la herida, es solo que me dio comezón y ya.


— Si no tiene nada que ver con la herida levántate la camisa y déjame ver—Dijo serio. —No tienes por qué preocuparte de que yo vea si la herida en verdad no se te infecto.


— ¡NO! ¿Por qué tendría que enseñarte? En todo caso si te estoy mintiendo o no, no es asunto tuyo, ya te dije que no tiene nada que ver con la herida—Volví a decir. —Así que por favor no te entrometas.


Note como Brian sonreía y se giraba dándome la espalda, claro que no le iba a mostrar la herida para que se diera cuenta de que si se me había infectado, capaz que era como Tom y se le volvió a meter la estúpida idea de llevar al hospital con lo que los detesto. Cuando mire que Brian comenzaba a avanzar lentamente de nuevo al sillón sentí un alivio pues pensé que ya no me preguntaría nada de la herida pero como siempre, me equivoque. De repente sentí un agarre en mi cintura y como me tiraban hacia enfrente, cerré los ojos pensando que me iba a caer pero los abrí de golpe al sentirme apoyado en algo blando.


Los abrí para encontrarme con que estaba recostado en el sillón y con Brian a un costado de mí sosteniéndome con una mano las muñecas y con la que le quedaba libre subiendo despacio mi camisa.


— ¡¡¿Qué te pasa?!! —Le grite al ver que estaba subiendo mi camisa. —¡Déjame ya te dije que la comezón que tengo no tiene nada que ver con la herida!


— Si no tiene nada que ver entonces ¿Por qué no quieres que mire? —Pregunto mirándome directamente a los ojos. — Dime ¿Por qué?


— ¡Porque no es de tu incumbencia! A ti no te importa si mi herida está infectada o no y ya ¡déjame en paz!


— Pues te equivocas Billy si me importa.


Y después de haber dicho esto subió mi camisa de golpe dejando ver el costado donde estaba mi herida, abrió los ojos cuando noto que estaba roja y un poco morada, había un poco de costras pero la herida prácticamente seguía abierta y se miraba mal. Se quedo mirando fijamente a la herida y luego fijo su vista en mí con una no muy buena cara.


— ¿Qué no está infectada? ¿Estás tonto Billy? —Pregunto soltándome y poniéndose de pie. —Esa herida está muy mal, esta súper infectada.


— No es verdad, lo único que pasa es que no ha cicatrizado es todo—Dije levantándome del sofá. —Además ¿A ti qué? No eres tu el que está herido, no entiendo porque te importa.


— Pues me importa porque eres.. —No pudo seguir hablando por que sonó su celular. Lo tomo y contesto. — Sí, soy yo ¿Qué paso? ¿Cómo están?... ¡¿Qué?! ¿Pero cómo?.. —Comenzaba a decir Brian sorprendido y poniendo una cara de sorprendido. — No, el no puede estar muerto…pero ¿Cómo?... —¿Qué había dicho? ¿Qué alguien había muerto?. —Si.. si el está aquí conmigo..pero ¿Quién lo hizo? ¿Quién lo mato?


Brian se quedo escuchando lo que le respondían y yo sentía como por todo mi cuerpo comenzaba a sentir nervios, como mi respiración se volvía agitada y mis manos comenzaban a temblar, ¿A quien habían matado? ¿Quién había muerto? Tenía que ser uno del otro bando, de los de Sergio o Axel pero no Tom, pero por cómo veía a Brian estaba seguro de que era uno de los que yo conozco, solo esperaba que no fuera Tom, el no.


— Si está bien… está bien aquí los espero..si, si estamos en el rancho.. —Decía aun caminando de un lado a otro. —Ok, nos vemos.


Termino de hablar y se sentó en el sillón recargando los codos en las rodillas y tapándose la cara con las dos manos. No, no esa actitud no me estaba gustando para nada, no me estaba dando buena espina.


— Bri..Brian.. ¿Quién murió? —Me atreví a preguntar.


Este se quito las manos de la cara y levanto la vista mirándome, había lagrimas en sus mejillas y en sus ojos habían lagrimas que querían salir. No, no eso no me estaba gustando para nada, me sentía más nervioso y como mis manos temblaban más.


— Una persona..muy importante para mí—Dijo limpiándose las lagrimas de las mejillas. —Uno de mis grandes amigos.


¡BOM! No, esa puta respuesta no me había gustado tampoco, yo quería preguntarle que amigo, pero de mi garganta no salían las palabras para preguntárselo. En este momento ya no me acordaba de la comezón o el ardor de la herida, en este momento solo pienso en que quien sea que haya muerto no sea mi gemelo, no sea Tom. Brian se quedo sentado en el sillón y yo me quede parado, por lo que había escuchado ahorita ellos iban a venir al rancho. Pasaron los minutos, incluso creo que una hora cuando el celular de Brian volvió a sonar este ni siquiera contesto, se levanto del sillón y encendió las luces de afuera donde estaba la gran entrada salió de la casa y yo le seguí. Corrió hacia la gran puerta de madera y yo solo me quede parado a una distancia considerable, abrió la gran puerta dejando ver a Sam, Abram, Gastón quien llevaba a alguien en sus manos, en ese momento sentí mis piernas flaquear, no distinguía muy bien a quien llevaba Gastón en sus manos pero no mire a Tom entrar.


— No.. no puede ser Tom—Dije comenzando a caminar lentamente hacia donde estaban todos.


Estaba a punto de llegar hasta donde estaba Gastón cuando mire que más atrás iba entrando Tom, con la cabeza gacha y el corro de su sudadera puesto. Sentí como un enorme peso de encima se me quitaba al ver a mi gemelo entrar pero entonces, si Tom no era quien estaba en los brazos de Gastón ¿Quién era?. Brian se acerco hasta Gastón y puso la mano quitando la sudadera que llevaba encima el cuerpo y dejando ver quién era.. Nicolás.


— ¿Quién..quien lo mato? —Pregunto Brian entrecortadamente. —¿Quién lo hizo?


Gastón agacho la cabeza, Sam y Abram hicieron lo mismo y Tom, mi gemelo levanto la vista mirando atentamente a Brian.


— Yo lo mate—Dijo mi gemelo en tono firme. — Yo lo hice.


¿Qué? había escuchado mal ¿verdad? O Tom estaba mintiendo, porque no podía ser, el no podía haber matado a su amigo a uno de los de su bando, el no podía haberlo hecho. Tenía que haber sido uno de los de Axel o Sergio pero el no, era..era increíble que él lo hubiera hecho. Tom camino hacia Brian poniéndose frente a él, pude notar como la sudadera de mi gemelo estaba llena de sangre, como en su rostro también había pequeñas manchas y en su mano derecha llevaba una pistola.


— ¿Qué tú hiciste qué? —Pregunto Brian sin creérselo. — Estas bromeando Thomas ¿verdad?


— No, no estoy bromeando te estoy diciendo que yo lo mate—Respondió tranquilo. — Yo lo hice.


— ¡¿Qué?! ¡¿Por qué?! —Comenzó a preguntar Brian mientras empujaba a Tom. — ¡¿Por qué lo mataste?! ¡¿Cómo pudiste?! ¡Nicolás era de los nuestros, TU AMIGO!


— Ese estúpido no era mi amigo.


Yo al igual que Brian no podía creer lo que estaba diciendo Tom, no podía creer que Tom había matado a uno de sus aliados, a su amigo, a su cómplice era..era imposible de creer.


— ¡¡¿Cómo te atreves a decir que no era tu amigo?!! Nicolás era tu amigo y uno de tus aliados—Le grito Brian enojado. — ¡¡¿Por qué fregados lo mataste?!!


— Porque el muy estúpido se atrevió a traicionarme, no era mi amigo, no era mi aliado era un puto mentiroso que me traiciono por la espalda—Soltó enojado mi gemelo. —Ese que dices que era mi amigo, me traiciono.


— ¡Estas mintiendo! ¡Nicolás no era ningún traicionero, jamás hubiera sido capaz de lo que estás diciendo!


— Brian.. —Dijo Abram. — Tom está diciendo la verdad, Nicolás lo traiciono por la espalda.


— No, no lo puedo creer, Nicolás era un gran amigo mío no puede ser.


— Ese estúpido no era amigo de nosotros Brian, ¿Qué no te queda claro que en esto nadie es amigo de nadie? Nadie, óyelo bien, nadie puede confiar en otro que no sea el mismo—Dijo mi gemelo. —Y Nicolás ya nos lo dejo muy claro.


Brian no dijo nada mas, solo se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la casa seguido de Gastón quien llevaba el cuerpo de Nicolás, y Sam y Abram quienes iban con la cabeza gacha. Yo me quede parado mirando a Tom quien miraba hacia el piso apretando los puños. Lo miraba mal, creo que estaba mal, comencé a caminar lentamente hasta donde estaba, quería abrazarlo y decirle que contaba conmigo y estaba a punto de abrazarlo cuando hablo.


— No me abraces—Dijo alejándose. —Vámonos de este puto rancho que tu y yo todavía tenemos mucho de qué hablar.


— Si quieres nos podemos quedar.. pues a pesar de todo te llevabas bien con Nicolás.. —Dije.


Tom levanto la vista y me miro de mala gana y no entendí porque, yo solo le dije que podíamos quedarnos si quería porque a pesar de que Nicolás lo hubiera traicionado o lo hubiera engañado era su amigo ¿no?, se llevaban bien.


— No nene, yo no me llevo bien con los traicioneros—Dijo mirándome a los ojos mientras se acercaba. —Yo no me llevo para nada bien con los mentirosos y la gente que traiciona.


— Pero.. —Trate de decir pero no me dejo terminar de hablar.


— Pero nada nene ahora vámonos que ya te dije que yo y tu tenemos demasiado de que hablar—Dijo tomándome del brazo haciendo que comenzara a caminar detrás de él. —Demasiado de que hablar.


No dije nada mas, seguí a Tom hasta afuera del rancho donde estaba su carro estacionado, quito la alarma y se adentro en el carro y yo le seguí. En todo el camino hacia la casa hubo puro silencio, Tom no decía nada ni siquiera se volteaba un momento a mirarme, tal vez era por lo que había pasado con Nicolás, ¿De qué forma lo habrá traicionado? ¿Qué habrá hecho? Y lo que más me sorprende, es que Tom lo haya matado, a veces me pregunto ¿Cuántas personas no ha matado Tom?. Llegamos en unos cuantos minutos a la casa, mi gemelo se bajo lo más rápido posible del carro dejándome a mi adentro sorprendido por eso, me baje y me encargue de ponerle seguro a las puertas y baje. Cuando entre a la casa mire que Tom se estaba quitando su sudadera, había dejado la pistola en un pequeño mueble del recibidor y se quitaba la camisa manchada de sangre que traía.


— Tom.. —Fue lo único que dije al ver como quedaba desnudo del torso para arriba.


— ¡Todo esto es una mierda! ¡Todo es una mierda! —Grito tirando la camisa al piso. — ¿Me lo merezco? ¿Hice algo para merecérmelo?


Yo ante esas preguntas y esos gritos que había soltado lo mire sorprendido, ¿A qué se refería ahora? ¿Por qué decía eso?, mire como comenzaba a caminar de un lado a otro llevándose las manos a la cabeza, caminaba como si estuviera desesperado, enojado, triste, lo miraba demasiado raro.


— Tom..¿Estás bien? —Me atreví a preguntar, era obvio que no estaba bien pero quería hablarle. — ¿Por qué dices eso?


— ¿Qué si estoy bien? —Dijo con una sonrisa y mirándome detenidamente. — ¡Claro que no estoy bien! ¿Acaso me miro bien?


— Yo..Tom es que.. ¿Por qué ?.. —No me dejo terminar de hablar.


— ¡ESTOY MAL PORQUE ESTOY RODEADO DE GENTE METIROSA, TRAIDORA y ESTUPIDA! —Grito mientras se acercaba lentamente a mí. — ¡ESTOY RODEADO DE GENTE QUE NO SABE LO QUE QUIERE, DE GENTE QUE VIVE MINTIENDO DE GENTE… COMO TU!—Dijo esto último con una sonrisa.


— ¿Cómo..como yo? —Dije al no entender porque decía eso ultimo. —Yo no soy ningún mentiroso.


— Y sigues igual nene—Dijo con una sonrisa acercándose con pasos más lentos. —A veces pienso que de verdad eres una puta nenaza, porque noto que no tienes las suficientes agallas como para enfrentar algo o a alguien.


Eso que había dicho de que pensaba que de verdad parecía una ''chica'' no me había gustado para nada, ese comentario hizo que me enojara un poco ahora, ¿Por qué me estaba diciendo eso?. Ahora sus manos ya no estaban en su cabeza, estaban a los costados de su cuerpo, su mirada completamente situada en mi y sus labios tenían una sonrisa, pero no una sonrisa de las que siempre muestra sino una sonrisa que me daba..miedo.


— Tu eres el primero en mi puta lista de los mas mentirosos, de los mas traicioneros—Dijo con enojo estas palabras. —Eres el primero de toda la larga lista que tengo.


— Yo no soy ningún mentiroso—Me defendí. — ¿Cuándo te he mentido? —Pregunte enojado, pero me di cuenta tarde que no había sido bueno hacer esa pregunta ya que si hacemos un poco de memoria de verdad yo si le he mentido, con Natalie, con que regrese con ella y con que me la folle cuando lo hice.


— Mas bien nene, creo que la pregunta seria ¿Cuándo no me mientes?


Ok, al parecer el enojo que había tenido antes ya se le había pasado pues no se miraba como cuando grito que todo era una mierda. Se detuvo unos cuantos pasos antes, se quedo separado de mi mirándome directo a los ojos mientras apretaba los puños con fuerza cosa que me sorprendió y para nada, pero para nada me dio buena espina.


— To..Tom..-Dije nervioso al ver cómo me miraba. —¿Qué..qué te pasa?

— ¡ERES UN PUTO NENE!-Me grito mientras comenzaba acercarse de nuevo a mí. —¿Sigues creyendo que soy estúpido?


— ¿Qué..que dices? —Pregunte sin entender, mi voz sonaba cortada, estaba nervioso.


— ¡¡QUE ERES UN PUTO MENTIROSO!! ¡¿CUANTAS VECES DEBO DECIRTE QUE NO ME TRATES DE VER LA PUTA CARA?! ¡¿CUANTAS VECES DEBO DECIRTE QUE NO SOY UN ESTUPIDO?!


— Yo..Tom..no..no se dé que me hablas.. —Tom se acercaba a paso lento hasta donde yo estaba. Se miraba enojado y no sabía porque.


— ¡¡ME DOY CUENTA DE TODO ESTUPIDO!! ¡¡DE TODO LO QUE TU HACES!!-Me volvió a gritar esta vez llegando hasta donde yo estaba y tomándome por el cuello de la camisa. — ¡¡SE CADA PUTO MOVIMIENTO TUYO!!


— Tom..Tom.. ¿Qué..que tienes? —Pregunte con miedo al ver que su mirada era profunda y con mucho enojo. —¿De..de que hablas?


— ¡DE QUE VAS A VALER MADRE NENE!-Me respondió al momento que me metió un puñetazo en el estomago. — ¡SE PERFECTAMENTE QUE NO SOLO VOLVISTE CON NATALIE SI NO QUE TE ACOSTASTE CON ELLA EL MISMO DIA QUE REGRESARON! —Me dio otro puñetazo en el estomago y me estrello de espaldas contra la pared. —¡¿QUE PIENSAS QUE NO ME ENTERO DE LO QUE HACES?!


Sentí mi espalda doler por el impacto que había tenido contra la pared y como el aire se me escapaba debido a los dos puñetazos que Tom me había dado, ¿Qué estaba haciendo? ¿Por qué me había pegado? ¿Cómo se había enterado de eso?, me preguntaba mientras sentía como Tom apoyaba su mano en mi garganta haciendo fuerza, apretándome del cuello mientras me empujaba la cabeza contra la pared haciendo que me pegara.


— ¡¿De verdad crees que soy tan estúpido?!-Me pregunto apretando más su agarre en mi cuello.


— To..Tom..no..no me estas..dejando.. —Se me dificultaba hablar por el agarre que tenia sobre mi cuello. —No..no me dejas..respirar.


— ¡No te pregunte si te dejaba respirar o no puto mentiroso! —Me respondió en voz alta y posicionando ahora su otra mano sobre mi cuello, sentía como mi cabeza comenzaba a doler, como no podía respirar.


— To..Tom.. —Dije poniendo mis manos sobre las suyas para soltarme de su agarre.


Al principio se me dificulto demasiado el poder quitar sus manos sobre mi cuello pero al final pude hacerlo, de un empujón logre que se alejara de mi y lleve mis manos a mi cuello agarrándome levemente mientras tosía, me había apretado fuerte del cuello haciendo que el aire me faltara. Levante la vista la cual había fijado en el suelo y me encontré de nuevo con la mirada de Tom, una mirada que demostraba enojo, rabia.


— To..Tom.. ¿Por qué..porque?..no me dejabas respirar—Le grite enojado aun tocándome el cuello. — ¿Estás loco o qué?, eres un estúpido.


— ¡NO, AQUÍ EL UNICO ESTUPIDO ERES TU! —Me grito volviendo a acercarse a mí y empujándome contra la pared de nuevo. — ¡¿QUE NO ENTIENDES QUE CONMIGO NO SE JUEGA?! ¡ERES UN PUTO MENTIROSO DE MIERDA!


— ¡¿Por qué dices eso?! —Pregunte como pude intentando apartarlo de mí poniendo mis manos en su pecho. — ¡YO NO TE HE MENTIDO!


Tom se aparto de mí de golpe, dejándome libre ¿Qué fregados le estaba pasando? ¿Cómo se había enterado de que me acosté con Natalie cuando regresamos?, pero eso no era todo lo importante sino que le estaba mintiendo, estaba enojado porque le había mentido y ahora daba la casualidad de que seguía igual, seguía negando lo que me decía. Iba a dar un paso hacia Tom quien estaba de espaldas a mí pero este se giro y sentí como algo duro daba contra mi cara haciendo que por la fuerza y el golpe terminara cayendo de culo al piso. Me lleve la mano derecha a la nariz donde había recibido de lleno el golpe, note como en mi mano comenzaba a llenarse de un líquido, la aparte y mire que era… sangre.


— ¿Por qué..me pegas? —Le pregunte entre sorprendido y enojado. —¿Qué te pasa?


— ¡ME PASA QUE TE VOY A ENSEÑAR QUE A MI NO ME TRATAS DE VER LA CARA DE ESTUPIDO! —Me grito acercándose a mí. — ¡TE VOY A ENSEÑAR QUE CONMIGO NO SE JUEGA!


Yo lo mire con los ojos bien abiertos, se miraba demasiado enojado, apretaba sus puños con fuerza, ¿A qué fregados se refería con que me enseñaría a que no le trate de ver la cara de estúpido?. Estaba completamente sorprendido, aturdido por el puñetazo que me había dado en la cara y con demasiados nervios y..miedo, miedo a la mirada que me estaba dando.


— Yo..Tom..no..yo no quiero verte la cara.. —Dije mirando cómo se acercaba quedando frente a mí de pie. —Eso..no es verdad.


— ¡Claro que me quieres ver la cara de estúpido!, pero adivina que nene.. —Dijo mirándome con una sonrisa. — ¡NO SOY NINGUN ESTUPIDO!


Apenas termino de decirme esto y sentí como de una patada en el pecho que él me proporciono caí de cuerpo completo al piso, si ya había caído de sentón ahora había caído completamente. Trate de levantarme de nuevo pero sentí otro golpe, esta vez en mis piernas, de nuevo me había dado una patada. Trate de levantarme pero no pude, me dio otra patada pero esta vez en un costado.


— ¡TOM! —Grite al sentir el golpe. — ¡¿Qué..que te pasa?!


— ¡TE VOY A ENSEÑAR QUE A MI NADIE PUEDE VERME LA CARA DE ESTUPIDO, QUE A MI NADIE ME MIENTE! ¡TE VOY A ENSEÑAR QUE CONMIGO ESTAS DEMACIADO METIDO!


— To..Tom.. —Dije ya con demasiado miedo al oír su tono de voz. —Yo.. yo no trato de verte la cara, ¡YO NO TE HE MENTIDO!


— ¡¡CALLATE!! ¡NO ME SIGAS MINTIENDO! —Me grito más fuerte y dándome otra patada en el costado.


— ¡AAAAHH! —Grite. La patada que me había dado me había dolido mucho.


Entonces caí en lo que estaba pasando, Tom me estaba dando tremendas patadas en todo el cuerpo, las piernas, el costado izquierdo donde no tenía la herida, me gritaba y yo, yo por más que tratara de levantarme de gritarle que me dejara, que no siguiera pegándome patadas no podía, las palabras no salían de mi garganta. Abrí los ojos cuando no sentí otro golpe de el hacia a mí para encontrarme con que estaba parado mirándome con demasiado enojo, seguía enojado, seguía apretando los puños.


— Conmigo nadie juega nene, a mí nadie me miente—Comenzó a decir mientras daba vueltas alrededor de mi. — Nadie trata de verme la cara, ¡A NADIE DEJO QUE ME ENGAÑE!


— T..Tom.. —Logre articular, mi cuerpo me dolía, las piernas y en especial el costado izquierdo donde había recibido más patadas. — Yo..no.


— ¡NO SIGAS MINTIENDO ESTUPIDO! ¡ENTIENDE QUE YO YA SE TODO! SE PERFECTAMENTE QUE TE ACOSTASTE CON NATALIE CUANDO REGRESASTE CON ELLA, SE QUE QUERIAS MANTENERLO EN SECRETO, TODO ESO YA LO SE! —Grito a todo lo que dieron sus pulmones, yo cerré los ojos. — SE TODO LO QUE HACES Y LO QUE NO, PERO NO TE PRECOUPES NENE.. —Dijo arrastrando las últimas palabras en un tono que hizo que me diera más miedo, me estaba pegando y yo ¿Qué hacia? Nada, no podía hacer nada. —Estoy seguro que después de esto ya no te van a quedar ganas de volver a mentirme y tratar de verme la cara.


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— ¿Qué..que vas hacer Tom? —Pregunte con miedo y en vez de una respuesta, recibí una tremenda patada en el costado donde estaba mi herida. — ¡AAAAHHHH! —Grite fuerte, me había dado en la herida haciendo que sintiera un tremendo dolor, ¡PUM! Otra patada en el mismo lugar. — ¡AAAHHH! ¡PARA!


— ¡CLARO QUE NO VOY A PARAR! —Me dio otra patada, lleve mis manos a la zona de la herida donde me estaba pegando. — ¡TE VOY A ENSEÑAR DE LA MEJOR MANERA A QUE NO ME DEBES MENTIR Y ENGAÑAR..N-E-N-E M-I-O.


Mis ojos estaban completamente cerrados, mis manos apoyadas en la herida la cual me dolía a más no poder, sentía mis piernas temblar y oía los pasos de Tom cerca de mí, sabía perfectamente que estaba dando vueltas alrededor de mi cuerpo el cual estaba tirado completamente en el piso, intente levantarme más de una vez pero no pude, cada que lo intente el me daba una patada haciendo que volviera a caer al piso. Me estaba dando tremendas patadas, las cuales me dejaban inmóvil, no podía moverme o decir alguna oración, solo podía gritar.


— ¿Recuerdas como papa te enseñaba que no debías tocar el maquillaje de mama? —Me pregunto mientras reía en lo alto, no, no eso no. — ¿Lo recuerdas nene?


— Eres un puto marica Bill, ¡¿Cómo se te ocurre tocar el maquillaje de tu madre y pintarte los ojos?! ¡¿Estás loco?! ¡TU NO ERES UNA PUTA CHICA! ¡ERES UN CHICO Y LOS CHICOS NO SE MAQUILLAN! —Me grito furioso mi papa arrebatándome de las manos el lápiz color negro que traía.


— Pa..papa..yo..yo solo.. —Dije con miedo al ver cómo me miraba, esa mirada profunda y apretando los puños hasta hacer que sus nudillos de vieran blancos. — Yo..yo no.


— ¡TE VOY A ENSEÑAR QUE NO DEBES HACER ESO! ¡TE VOY A ENSEÑAR QUE NO ERES UN PUTO MARICA, SI NO QUE ERES UN HOMBRE! ¡UN HOMBRE BILL! —Grito demasiado fuerte.


Trate de decir algo pero no pude hacerlo al sentir una mano en mi mejilla, me había dado una bofetada demasiado fuerte haciendo que mi rostro se girara un poco. Y después de esa bofetada comenzaron a venir mas.


— ¿Lo recuerdas nene? ¿Recuerdas como mi papa te enseñaba? —Pregunto de nuevo con una risa acompañando sus palabras, yo apreté más los ojos y sentí como una maldita lágrima comenzaba a resbalar por mi mejilla, claro que me acordaba, claro que lo hacía. — Pues así te voy a enseñar yo que no debes mentirme.


— ¡NO TOM! —Fue lo último que pude gritar y lo único que pudo salir de mi garganta al sentir otro golpe sobre mi cuerpo, sobre la herida la cual me dolía cada vez más.


Sentí de nuevo sus patadas sobre mi cuerpo, estaba pegándome demasiado fuerte, yo tenía mis manos sobre la herida tratando de cubrir que me pegara de lleno, me dolía, me ardía, me dolía, mis lagrimas comenzaban a salir sin querer parar. ¿Por qué me estaba pegando así? ¿Por qué me había recordado como mi papa me pegaba? Yo no había hecho nada, si le había mentido con eso pero.. pero no era para que me estuviera pegando así. Entonces quite mis manos de la herida al sentir un tremendo puñetazo sobre mi rostro, me había pegado de nuevo en la cara y no solo sentí eso, sino que también sentí un tremendo peso sobre mi estomago.


— ¡AAHH! ¡ME DUEEELEEE! —Grite mientras tenía mis manos sobre mi nariz, sentía como salía mas liquido que antes. — ¡MEE DUELEE!


— Y TE VA DOLER MAS PORQUE A COMO DE LUGAR VAS APREDER QUE A MI NO ME MIENTES, NO ME ENGAÑAS Y MUCHO MENOS, ME TRATAS DE VER CARA DE ESTUPIDO— ¡PUM! Un puñetazo en mi estomago, estaba sobre mí. — NO LO SOY, NO LO SOY, NO SOY UN ESTUPIDO AL QUE PUEDES MENTIRLE— Otro puñetazo en mi estomago sacando el aire, no quería abrir los ojos, no podía.


— ¡AAHH! ¡YAA..DEJA..DEJAME! —Grite intentando apartarlo sin conseguir nada. — ¡NO..NO TE CREO ESTUPIDO..LO SIENTO..LO SIENTO!


Me dolía, seguía pegándome y yo seguía intentando apartarlo pero no podía, entonces sintiéndome morir sentí otro fuerte puñetazo en mi herida seguido de mas golpes, mas lagrimas comenzaron a salir de mis ojos, el dolor seguía aumentando, me estaba pegando demasiado, me quería matar a golpes. Mis manos cayeron a los costados de mi cuerpo, no tenía fuerza para quitarlo de encima de mí, no podía. Había quedado como un costal tirado en el piso, dejando que me pegara, que me lastimara, no podía seguir intentando apartarlo de mí, no podía tratar de cubrir mi herida ya que no tenía fuerzas, los golpes que me estaba dando me las habían quitado, me dolía TODO, me había pegado en TODO mi cuerpo.


— Tú tienes la culpa de todo esto nene—Dijo con voz ronca y profunda apretando su mano contra mi cuello, mientras que la otra estaba situada en mi estomago. —Por tus estúpidas mentiras te está pasando esto, por querer verme la cara y no hacer lo que te dije te está pasando esto.


— Me d..duele..dej..dejame—Le pedí en casi un susurro. —No..no te volveré..a me..mentir.


— No, claro que no volverás hacerlo porque después de esto no creo que te queden ganas— Y ¡PUM! Un puño cerrado cayó contra mis labios.


Rotos, si definitivamente después de ese golpe mis labios de seguro se habían roto y no me quedaba la menor duda ya que sentía como comenzaba a salir liquido de ellos, el mismo liquido espeso que seguía saliendo de mi nariz. Sin fuerzas, con el cuerpo todo adolorido, sin poder creer quien me estaba pegando así me encontraba, Tom tenía todavía su mano sobre mi cuello apretando fuertemente como la primera vez que me había tomado, el aire comenzaba a faltarme y mi estomago sentía una presión muy fuerte.


— Eres un estúpido nene, no sabes con quien te metiste—Dijo apretando mas. —Decidiste jugar conmigo ¿no? Querías de nuevo ser mi nene, pues ahora— Apretó mas. —No hay marcha atrás, desde un principio te dije, ahora te aguantaras.


— To..Tom.. —No podía hablar, mi cuerpo dolía demasiado sentía como palpitaba cada zona en la que me había pegado y la respiración seguía sin llegar a mis pulmones. —Tom..por..por favor.


— Me vas a odiar, me vas amar más de lo que ya lo haces, me vas a querer a tu lado, no te vas a querer separar de mi—Comenzó a decir soltando poco a poco su agarre sobre mi cuello. — Vas a suplicarme, vas a arrastrarte por mí.


Y soltó por completo su agarre y la presión que tenia contra mi estomago, aun con los ojos cerrados sentí como se levantaba de encima de mí, las lagrimas no dejaban de salir y mi cuerpo dolía cada aun mas cada segundo que pasaba. Decidí abrir los ojos y me contra con los de mi gemelo mirándome aun con enojo.


— Vas a pagar el haberme engañado con la putilla de tu novia—Dijo apretando de nuevo los puños. — Lo vas a pagar créeme, que peor que esto.


— To..Tom..


Y ¡PUM! Otra patada en mi costado donde estaba la herida, me volvió a dar otra patada antes de irse y caminar hacia su habitación. Me había dado tremenda paliza, me había dejado tirado en el piso del recibidor, mis manos temblaban al igual que mis piernas, mi cuerpo aun seguía recostado por completo en el piso, abrí los ojos y mire al techo.


— CON ESO NIÑO ESTUPIDO NO VOLVERAS AGARRAR EL MAQUILLAJE DE TU MADRE, CON ESO TE QUEDARA ENTENDIDO QUE NO DEBES MAQUILLARTE—Me grito mi papa arrojándome al suelo. —Y MAS VALE QUE NO LO VUELVAS HACER PEQUEÑO MARICA.


Mas lagrimas siguieron resbalando por mis mejillas recordando esa vez que mi papa me había pegado, me lleve las manos a la herida por encima de la camiseta que llevaba y pude ver que estaba mojada, metí mi mano por debajo tocándome y dándome cuenta al sacarla que estaba sangrando. No podía moverme, no podía sentarme porque todo el cuerpo me dolía, me había dado demasiadas patadas, demasiados puñetazos y yo..yo seguía sorprendido por eso. No solo me había pegado y me había dejado atónito por eso, sino que había dicho casi las mismas palabras que mi papa había dicho cuando me pego aquella vez.


*¿Estas a gusto ahora Bill? — No, esa voz no. — ¿Ya ves lo que te paso por estúpido?*


No podía responderle, no tenía la menor fuerza para hacerlo aparte de que no quería


*¿Vez que te ha hecho? ¿Vez como te ha golpeado—Me recrimino. — Eres un estúpido, te dije que te estabas metiendo en un maldito problemón, te dije que no lo hicieras que te alejaras pero como el estúpido que eres no lo hiciste, ahora ¿estás contento con lo que te hizo el monstruo de tu hermano? ¿Con lo que hizo la persona a la que creer amar?*


— Yo..yo.. —Comencé a decir mientras me tocaba más fuerte la herida tratando de hacer presión para ver si se quitaba el tremendo dolor que sentía. — Yo..yo me lo merecía.


*¿QUE? ¡¿ESTAS LOCO?! ¡¿COMO PUEDES DECIR QUE TE LO MERECIAS?! —Pregunto mi ''conciencia'' sorprendida y enojada.*


— Por..por mentirle hizo..hizo..esto.. —Comencé a decir mientras más lágrimas salían de mis ojos. —Por mentirle..por mentirle me hizo esto..y..esta..en todo..su dere..derecho.


*¡DEFINITIVAMENTE TU ESTAS ESTUPIDO! ¿COMO DICES ESO? EL NO TENIA EL DERECHO EN PEGARTE COMO LO HIZO, NO ES NADA TUYO, NO TE QUIERE, ES TU HERMANO GEMELO NO TU PADRE O PAREJA PARA HABERTE PEGADO COMO LO HIZO, ¿QUE NO ENTIENDES? —Pregunto alzando la voz. —ESTAS MAL*


— No..yo..yo me lo..merecía por haberle mentido.. —Mas lagrimas cayeron por mis ojos. —Lo merecía.


*A mí nadie me trata de ver la cara, nadie me miente, nadie me volverá a engañar. Jamás dejare que de nuevo pase por encima de mí, jamás dejare que él se sienta bien y yo no.*